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¡Consejos para días de lluvia!

Consejos para nuestra peregrinación en días de lluvia ¡Que la lluvia no nos paralice!

¡Peregrinos, que un día lluvioso no nos fastidie el camino! Debemos tener en cuenta que en la meteorología que afecta la zona norte de la península es normal encontrar precipitaciones, por ello en nuestro camino hacia Santiago es común que la lluvia afecte a algunas de nuestras etapas.

Por este motivo, hoy os traemos varios consejos para que el agua no se convierta en un inconveniente.

consejos para tus días de lluvia en el camino de santiago

Trata de ser previsor/a

una de las cosas más importantes para peregrinar, es la organización y la previsión. ¡No salgas a la aventura! Asegúrate de que llevas una idea del tiempo que hará durante tu camino. Por supuesto, si consultas el tiempo antes de salir a caminar, equípate antes de salir. No aguantes hasta que veas que la lluvia empieza a caer.

Cúbrete, es fundamental.

Cuando hablamos de cubrirnos, no solo te invitamos a que lleves un chubasquero, sino a que te cubras bien por capas. Pero…¿qué significa eso exactamente? Lo primero es que lleves pantalones impermeables, de manera que evites mojarte. También, es importante que cubras tu mochila para evitar que se mojen tus pertenencias. Y, por último, te recomendamos llevar una gorra para evitar que la lluvia nos moleste en la cara.

Lleva un buen calzado

¿Qué sería de un peregrino si no llevara buen calzado? Uno de los puntos más importantes es llevar un calzado cómodo y sobretodo adecuado en estos días lluviosos. Es importante evitar resbalones indeseados en el barro.

Hidrátate y cuida tu salud

¡Cuídate! Es importante que aunque llueva hagas las paradas programadas con normalidad. Que la lluvia no suponga un sobreesfuerzo en tu etapa.

Resguárdate

Si ves que la lluvia es densa, intenta resguardarte en la medida de lo posible, antes que el agua te cale demasiado.

Abrígate y, cuando llegues al albergue donde descansarás y repondrás fuerzas, date una buena ducha caliente.

Seca tu ropa y pertenencias una vez llegues al albergue.

Suelen estar equipados con secadoras, aprovéchalas. Recuerda que el día siguiente tu ruta continúa y la ropa y calzado deben estar secos. Sentirás que todo el esfuerzo ha merecido la pena.

Aunque la lluvia a veces puede ser un obstáculo, no dejes que se convierta en un inconveniente.

 

¿Tienes anécdotas en días lluviosos? ¿Añadirías algún consejo? ¡Cuéntanoslo en comentarios! ¡Te leemos! 

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