La espiritualidad, presente en el Camino de Santiago
El Camino te ayuda a encontrarte
Ya ha comenzado la vuelta atrás para el Año Santo Jubilar Compostelano, esto quiere decir que todos los peregrinos que visiten la Catedral de Santiago de Compostela ganan el Jubileo. Pero no sólo se quedan con eso, el Camino de Santiago es mucho más.
El Camino de Santiago es una de las rutas espirituales que concede una experiencia única desde todos los puntos de vista.
Muchos peregrinos deciden repetir su experiencia para volver a encontrar la magia que envuelve al Camino, y te preguntarás que de qué magia se trata. Lo complicado es describirlo con palabras.
Para muchos peregrinos hacer el camino supone adentrarse en un periodo de cambios en sus vidas. Las horas andando se transforman en terapias personales que da lugar a reinventarse. Algunas de las reacciones más comunes entre los que llegan al destino final son “El Camino te cambia” y “El Camino te ayuda a encontrarte”.
La espiritualidad es uno de los valores intrínsecos a todos los peregrinos que realizan el Camino de Santiago. Los peregrinos recorren kilómetros, sabiendo que se trata de un camino físico; pero también recorren el camino interior, el personal y único.
El peregrino realiza el Camino de Santiago como búsqueda de espiritualidad y de viaje interior.
En una sociedad que te absorbe y no te permite reflexionar sobre ti, el Camino te invita a parar y tomar conciencia de tu vida. La soledad, la reflexión y solidaridad son sensaciones que permiten a todas las personas crear una conexión espiritual.
Desde el origen del Camino del Santiago, en la Edad Media, el sentido de la peregrinación no se ha perdido: el cambio de vida, el renacer de uno mismo o el replanteamiento de la propia existencia.
El Camino te permite despojarte de todo, de buscar las respuestas que necesitas a tus propias preguntas; actúa como metáfora de la vida. Vivir la experiencia del Camino te posibilita salir de tu entorno habitual y de tu propia imagen, te convierte en un ser anónimo sin etiquetas que impone la sociedad. En el Camino todos son iguales y todos necesitan de alguien o de algo.
Lo cierto es que el Camino de Santiago tiene algo mágico que te cambia por dentro, muchos lo realizan y acaban teniendo una experiencia que sobrepasan las expectativas iniciales.
¿Has sentido la conexión espiritual durante el Camino? ¡Cuéntanos tu experiencia!