El Monasterio de Santa María de Oseira es una fuente de espiritualidad tremenda. Es uno de esos puntos del Camino donde el peregrino puede recuperar energías, siendo acogido y atendido.

Si eliges hacer el Camino de Santiago por la ruta del Camino de la Plata descubrirás a tu paso maravillosos lugares que no conocías. 

España puede llegar a sorprender en muchos aspectos, su patrimonio y cultura es muy especial y la principal razón por la que cada año millones de turistas visitan. 

Al norte de España, en la provincia de Ourense, se encuentra el Monasterio cisterciense Santa. María la Real. Si te estas preguntando si ir o no al Monasterio, ¡la respuesta es siempre si! 

Declarado Bien de Interés Cultural, se encuentra esta construcción del siglo XII, en el concello de San Cristovo de Cea. 

El Monasterio de Santa María de Oseira es una fuente de espiritualidad tremenda. Es uno de esos puntos del Camino donde el peregrino puede recuperar energías, siendo acogido y atendido. Donde puede saciar esa sed espiritual que tantos peregrinos llevan, encontrándose consigo mismo y con la providencia.

Este lugar recoge dos curiosidades que ver con el mismo y, por supuesto, con el camino de Santiago. Nuestra centinela Yolanda Paz, natural de Oseira, ¡nos cuenta a la perfección todos los detalles sobre este increíble monasterio!

San Famiano

Dentro del Monasterio se hayan varias imágenes de San Famiano, un coloso de las peregrinaciones jacobeas y dedicado toda su vida a la peregrinación, la primera con 18 años. 

Nace en Alemania en el año 1090, llegó a Galicia en el siglo XII, vivió como ermitaño durante 25 años hasta que conoció la existencia del monasterio de Oseira, donde se hizo monje cisterciense. 

Como buen peregrino tenía la necesidad de coger de nuevo su mochila y, a los 55 años, le pidió permiso al Abad para poder peregrinar de nuevo a Jerusalén y Roma. Tras concederle al permiso, de vuelta al monasterio y llegando a Gallese falleció, en el año 1150.

Varios milagros se le atribuyen a San Famiano. Entre ellos, cuando estaba llegando a Gallese acosado por la sed, hirió una piedra con el bordón y de ella brotó un raudal de agua, que se conserva a día de hoy como fuente.  

A los cuatro años de su muerte, el Papa lo canonizó y lo hizo santo, siendo el primero de la orden cisterciense de toda Europa. A día de hoy, es el protector de los peregrinos en Oseira.

Hospital de peregrinos en Oseira

Por los datos de archivo y por libros que tenemos a día de hoy, el peregrino y el peregrinaje en el monasterio fue algo muy importante, ya que los monjes descubrieron muy pronto el mérito encerrado en la acogida dispensada a huéspedes y peregrinos.

Las primeras noticias históricas sobre la existencia de un centro benéfico data en el siglo XII. Pero ya en el siglo XII había monjes especialistas en medicina instruidos por médicos que recibían el  nombre de “maestro del hospital”. 

Debido a unos documentos, se confirma las diferentes donaciones destinadas al hospital del monasterio donde los peregrinos y los huéspedes eran atendidos por los monjes. Contaban con una gran bótica para la época donde los propios monjes realizaban cantidad de medicamentos.

Un dato curioso sobre el Monasterio es aquel que el Padre Damian Yáñez escribió en uno de sus libros relacionados con el Camino de Santiago, en él decía que en el Monasterio de Oseira, a los peregrinos que van rendir homenaje al Apóstol a Santiago se mantienen por tres días, se les cura, se les atiende con médico, cirujano y botica y si fallecen se hace entierro en comunidad, equivalente a 4.900 reales.

Y tú, ¿conoces algún otro dato curioso sobre el Monasterio Santa María de Oseira? ¡Déjanos un comentario!